¿Con que bitácoras virtuales, eh?
Seh.
¿Como así?
Porque era lo correcto. Moralmente, me refiero. Precisamente ayer conversaba con un Evangelista Sensacionalista sobre esto. Le pregunté si tenía un blog y me dijo que obvio. Ha sido de la onda doom metal el man. Bueno, de todas formas, me dijo que un botón deBackspace equivalía a 75E75 tachones en la cartilla. Le dije que el tachón por lo menos mantenía la esencia de humanidad en el escrito, y el me dijo que ese ni cagando era mi estilo. Le dije que era la plena, acordándome de los Kraftwerk. O más bien de los Can. Seh, de los Can. También me acordé de mis sueños con un disco duro gigante y que le chocaban las olas y que se podría y que nadie le iba a llenar.
¿Y qué pretendes?
Invocar a la reminiscencia. Después de todo, eran nuestros antepasados los que comían la carne cruda. Dejar de cocer, supongo. Demostrar que los sartenes literarios están sobrevalorados y que al aceite vegetal sí se lo usa demasiado.
Uh?
Quiero que le lean a la carne cruda.
Y te preguntas si podrás hacer una bomba con ella si está igual de chiclosa y la sangre se te mezcla con el arroz y está bien claro que así sí le vas a poder poner el parmesano encima sin que le abrume los sabores y te pones los pimientos y las especies porque ya no crees en las granjas de hoy en día y apenas cuando acabas de masticar un trozo te propones a cortar el siguiente y has olvidado activar las válvulas y un chorro se dispara hacia el retrato del Tío Hugo que cuelga de la puerta de la cocina y te preguntas si esa sería una coincidencia y se te va el apetito.
No sé qué foto poner.
me gustaron tus monólogos, el fraseo corto, y entre cortado también, si. a pesar del caos, ¿aparente?, quieren como decir algo, mucho, más bien.
ResponderEliminarun placer